El ganadero afectado por el incendio que arrasó su granja y cerca de 600 hectáreas de monte bajo el pasado 31 de julio en la localidad toledana de Valdeverdeja tendrá que sacrificar las ovejas que se salvaron del fuego por decisión veterinaria.
En declaraciones a Efe, el alcalde del municipio, Juan José Moreno, ha explicado que los servicios veterinarios han decidido sacrificar a las ovejas que no perecieron en el incendio por motivos de seguridad.
Lo ha perdido todo
"Según los informes, los animales están afectados por el humo, por lo que irán al matadero. Es una pena, este ganadero ha perdido todo", ha lamentado Moreno.
En el suceso, ha apuntado el alcalde, se perdieron un total de 350 corderos de leche y 50 corderas, a las que ahora se sumarán las supervivientes.
"Hasta ahora el ganadero ha recibido ayuda de otras explotaciones para atender al ganado, porque sus instalaciones están inservibles. La falta de maquinaria y el humo le van a dejar sin nada", ha lamentado.
La explotación ganadera quemada estaba dotada de instalaciones mecanizadas para el ordeño, un almacén de pienso y distintas salas acondicionadas para el ganado.
Pérdidas millonarias
Juan José Moreno ha señalado que las pérdidas para el ganadero "son millonarias, aún lo están estudiando los seguros, pero yo calculo que superarán los 200 millones de las antiguas pesetas".
El alcalde ha adelantado que el Ayuntamiento ya está manteniendo conversaciones con la Consejería de Agricultura para intentar buscar una solución para el ganadero afectado y que espera materializar el próximo mes de septiembre.
"Hemos hablado, pero aún de manera superficial. Lo que tenemos claro es que algo haremos para paliar la situación de este ganadero porque, con poco que sea, ayudará", ha aseverado.